REDUCIR LAS VICTIMAS MORTALES EN CARRETERA, SU PRINCIPAL OBJETIVO
La Agrupación de Tráfico es una Unidad operativa, especializada e integrada en el cuerpo de la Guardia Civil.Es una institución diseñada y configurada para realizar la misión específica de vigilancia, regulación, auxilio y control del tráfico, del transporte y la seguridad vial.
Desde 1959 vigilando las carreteras
A pesar de que la Guardia Civil se creó en 1844 por Real Decreto de 13 de mayo, los primeros pasos para la creación de la agrupación se dieron en 1953 cuando el Ministerio de Obras Públicas prevé la asunción de competencias en ordenación del tráfico por carretera en España. Atendiendo a la singularidad del territorio español, desde un primer momento se vio que el despliegue que tenía la Benemérita en todo el territorio nacional, ofrecía un potencial inigualable para que este cuerpo asumiera la responsabilidad de la vigilancia del tráfico.
Entre 1953 y 1959 se comenzaron a realizar las primeras labores de vigilancia del tráfico de forma experimental por agentes de la Guardia Civil en los 100 kilómetros de vías radiales que salían de Madrid. Ante el éxito alcanzado el 30 de julio de 1959 se decidió otorgarle la titularidad de la responsabilidad de la vigilancia y control de las vías interurbanas. Es a partir de entonces cuando se decide acometer planes de formación y especialización para los agentes destinados a las labores de vigilancia del tráfico.
En Canarias comenzaron a prestar servicio en 1961.
La Guardia Civil de Tráfico (GCT) comenzó su actividad en Canarias en septiembre de 1961 con la realización de su primer servicio en la carretera. La actividad se inició con una dotación de 38 motoristas, ocho conductores de vehículos auxiliares y dos especialistas de atestados.
El despliegue en las islas comenzó por Tenerife y Las Palmas. En 1962 se creó el destacamento de La Palma, en 1968 el de Lanzarote, en 1976 el de Gran Tarajal (Fuerteventura) y en 1986 el de Puerto del Rosario (Fuerteventura) y el de Garachico en Tenerife.
Su principal misión, la vigilancia y control del tráfico en carretera.
Tiene la misión específica de vigilancia, regulación, auxilio y control del tráfico en las vías interurbanas de todo el territorio nacional y en las urbanas en aquellos lugares en las que no existen policías locales.
Dentro de este marco sus principales cometidos son los de la protección y auxilio de los usuarios de las vías públicas, custodiar y mantener la disciplina del tráfico, realizar las investigaciones e instruir las diligencias que se requieran como consecuencia de accidentes.
Además como cuerpo policial también puede llevar a cabo las demás misiones encomendadas a los mismos.
Organización:
La agrupación se encuentra integrada orgánicamente en la Subdirección General de Operaciones dependiente de la Dirección General de la Guardia Civil. No obstante en lo concerniente al servicio en materia de tráfico depende funcionalmente de la Dirección General de tráfico (DGT).
Bajo el mando de un general de división se encuentra estructurada en Jefaturas, Asesoría jurídica, Sectores, subsectores y destacamentos. Esta organización se aprobó por el Real Decreto 367/1997 de 14 de marzo, adecuando así su organización a la división autonómica del estado español.
El Sector de Tráfico de Canarias bajo el mando del comandante Benito Monzón Rodríguez se encuentra organizado en dos subsectores coincidiendo con la división provincial del archipiélago. El subsector de Santa Cruz de Tenerife está distribuido a su vez en cuatro destacamentos y el de Las Palmas de Gran Canaria en seis.
Esta organización cubre las necesidades que se requieren como consecuencia de la singularidad del archipiélago.
La formación de los agentes, un factor imprescindible.
Todos los agentes se forman durante tres meses en la escuela de tráfico con sede en Mérida. Deben superar una fase teórica y otra práctica. El requisito indispensable para acceder a estos cursos es contar con un año de antigüedad como Guardia Civil profesional.
Finalizado el curso, los agentes que no consiguen plaza entre las convocadas por concurso, entran en un periodo de servidumbre de cuatro años en el que pueden ser destinados a tráfico en futuras convocatorias de vacantes.
Como en cualquier trabajo, los agentes además deben realizar los cursos de reciclaje que se convocan cada 10 años para los miembros de la benemérita que prestan servicio en tráfico y cada 5 para aquellos que pertenecen a otras agrupaciones. Con una periodicidad semanal se imparten charlas de reciclaje en los destacamentos con el fin de que los agentes estén al día en los cambios legislativos principalmente del código de la circulación, en el manejo de nuevos equipos o para refrescar conocimientos.
Por su parte los oficiales realizan cursos específicos de dirección que engloban todas las especialidades.
Resaltar que además el servicio diario, es una fuente de formación, ya que en cada actuación se ponen en práctica los conocimientos adquiridos en diferentes situaciones.
Organizados en especialidades para realizar mejor su labor.
Los agentes se agrupan en la especialidad de “motoristas”, que se encargan de la vigilancia y control de las vías de circulación y en la de “atestados” que se centran en la investigación de los accidentes. Las dos especialidades tienen sus cursos específicos que capacitan para realizar las tareas específicas de forma óptima.
Los motoristas además pueden especializarse en radares o en transporte, sin que estas dos actividades sean consideradas como especialidades. Para estas actividades realizan cursos principalmente de manejo de los equipos.
Para la reconstrucción de accidentes se cuenta con dos equipos especializados con sede en Madrid y Mérida. Para realizar su trabajo cuentan con los medios más modernos. Cuando son requeridos principalmente por la autoridad judicial informes periciales se trasladan a los lugares de los hechos, estudian el lugar, los hechos y toman medidas adicionales a las que puedan constar en los atestados. Con toda la información obtenida reconstruyen el accidente, generando como producto final una reconstrucción visual de los hechos. En los sectores se cuenta además con agentes especializados capaces de reconstruir un accidente, siendo inicialmente los que se encargan de este cometido.
Vehículos específicos para su cometido.
A día de hoy el Sector en Canarias cuenta con 192 motocicletas, 119 vehículos rotulados (automóviles y furgones) y 20 de camuflaje. Se cuenta además con el apoyo aéreo del helicóptero de la Guardia Civil, al no existir unidad aérea de la DGT en Canarias.
La plantilla se ha incrementado en los últimos seis años en un 33%, dimensionándose en 2010 en 468 plazas, de las que 456 están ocupadas, distribuidas entre guardias, suboficiales y, oficiales. Esto supone una dotación del 97%.
Los furgones de atestados cuentan con todos los medios modernos disponibles en cualquier oficina, como ordenadores, cámara fotográfica digital, entre otros.
Los radares, un medio para luchar contra el exceso de velocidad.
Para los controles de velocidad se dispone de 14 radares que se pueden instalar en los vehículos o sobre trípodes. Todos los equipos están homologados y han pasado las pruebas y certificaciones periódicas. Este equipamiento es de última generación, siendo capaces de tomar medidas de velocidad en los dos sentidos del tráfico de una carretera simultáneamente. También miden la velocidad de todos los vehículos que circulan por una vía de más de un carril aunque lo hagan en paralelo.
Por su parte los radares fijos están bajo el control de la DGT, enviando la información que obtienen directamente a esta.
La nueva uniformidad, mejora la visibilidad y seguridad del agente.
Desde 2008 los motoristas de la GCT visten el nuevo uniforme. Este cambio supone que los agentes realicen su labor de forma más segura al disponer de medidas de protección ante caídas, aportan mayor visibilidad tanto de día como de noche, son más cómodos y están diseñados atendiendo a las peculiaridades climáticas del territorio nacional. Además se sustituyen las tradicionales botas de media caña por un modelo de diseño de motorista profesional con más elementos de seguridad y mayor confort.
Para el verano se utilizan polos de manga corta que incorporan los elementos reflectantes que garantizan su visibilidad.
Además se dispone de chaquetones, traje de agua impermeable y pantalones interiores térmicos.
Los servicios.
Para optimizar los recursos humanos y los medios materiales, los servicios se fijan inicialmente a nivel de destacamentos, debidamente coordinados entre ellos. Una vez fijados se supervisan a nivel de Subsector, que puede complementarlos con motoristas propios o solicitar su modificación. Finalmente se revisan a nivel de sector, que también puede aportar medios propios para complementar las necesidades a nivel de comunidad autónoma.
Los servicios se fijan en jornadas laborales de 7,30 horas diarias, con un total de 37,5 horas semanales. Estos parámetros se pueden ver modificados por las circunstancias del servicio, como en cualquier actividad.
Los servicios más comunes son los controles y la vigilancia rutinaria del tráfico.
Los eventos deportivos que discurren por vías interurbanas, cuentan con la colaboración de la GC de tráfico, destacando en Canarias la participación en rallyes y pruebas ciclistas. Una vez que la prueba ha sido definida por los organizadores y la autoridad propietaria de la vía (el Cabildo Insular o el Gobierno de Canarias) por donde discurrirá ha dado la autorización, se inician las actuaciones. Junto con los organizadores se estudian todas las implicaciones que supone la actividad, especialmente en el corte del tráfico y la seguridad vial. El informe vinculante emitido se dirige a la DGT.
Los controles, un sistema eficaz para reducir la siniestralidad.
Los controles son los servicios que se establecen en puntos predeterminados de las vías públicas. El objetivo de los mismos es siempre la prevención del cumplimiento de la normativa de circulación vial como medio efectivo para reducir las muertes en carretera. Pueden ser de alcoholemia, de velocidad o mixtos. En los segundos se cuenta con el empleo de los radares, y se complementan habitualmente con pruebas de alcoholemia.
Para que su fin sea lo más efectivo posible, se establecen en lugares de tráfico conflictivo o porque por su situación estratégica aportan un añadido en la consecución del objetivo buscado, la reducción de los accidentes y especialmente de la siniestralidad.
Canarias, a la cabeza nacional en la disminución de muertos en carretera.
Atendiendo a los datos estadísticos manejados por la GCT del periodo comprendido entre el año 2003 y el 2010 los muertos en accidentes de tráfico en Canarias se han reducido en un 33,8%. El siguiente gráfico muestra la evolución del número de muertos por accidente en carretera en la comunidad canaria.
El número de controles de alcoholemia realizados en 2010 se ha incrementado en un 594% con respecto al año 2003. El incremento de los positivos en los test realizados ha aumentado en un 23% . Considerando que el parque automovilístico ha subido en en 20% durante este periodo (ha pasado de 1308667 a 1574872), el incremento relativo de los test positivos rondaría el 12%. Este incremento se justifica por el aumento tan significativo de los controles realizados.
En cuanto a las denuncias cursadas por exceso de velocidad durante el año 2010 los datos arrojan un incremento del 176% con respecto al año 2003. Estos datos hay que interpretarlos en el contexto del aumento de los controles realizados y en el incremento del parque automovilístico en Canarias.
Los conductores canarios, en la media nacional
Los conductores canarios por norma general colaboran con los agentes en los controles y en los casos en que son detenidos, facilitando la labor del agente. En muy pocas ocasiones se producen incidentes entre conductores y agentes.
La reducción de gastos no ha afectado a los servicios.
En la actual situación de crisis económica mundial, atendiendo a las directrices de la Agrupación, se han aplicado medidas de reducción de gastos que en ningún caso han afectado en el Sector a los servicios ni al mantenimiento de los medios.
Muchos mitos entorno a las actividades de los agentes.
A lo largo de la historia de han puesto en circulación muchos mitos y comentarios entorno al volumen de denuncias que realiza la GCT o al número de controles que realizan. Desde el Sector en Canarias, se insiste en que el único fin que se pretende alcanzar es el de garantizar la seguridad de todos los ciudadanos que utilizan las carreteras y el de reducir al mínimo la siniestralidad y por ende el número de muertes.
FUENTES:
- Entrevista realizada al Comandante Jefe del Sector de la GCT en Canarias, Benito Monzón Rodríguez.
- Web del Ministerio del Interior.
- Fotos: Cedidas por el Sector de Tráfico de Canarias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios están sujetos a moderación.